Una amalgama de inquietudes mal ubicadas
las has dispersado con un gesto de tus párpados
tú incitadora turbulenta del deshielo a fondo
penetras mi desconcierto en entusiasmo anárquico
que flagela todas mis fibras sensibles y puede
que no haya muerte ni vida que te detenga
afortunadamente
lunes, 12 de noviembre de 2007
ENTRE DIALÉCTICAS
Entre dialécticas de cuchillo
y espesos contoneos del protocolo
la inercia incesante de tu cabellera
demente negrura que me asienta
en descampados emocionales
donde fluye la existencia
ese meteorito
tan escéptico
La esquiva ternura del olvido
no acomete no defiende y el
desconcertante peso del pasado
magulla a deshoras
cuando tú tiñes tu refugio
de dulzura y sangre
y la melodía rezongante
del pelo en tu nuca
no me protege
Sorber tu vivencia y esa
locura oscura o entonces
desesperada supervivencia
y espesos contoneos del protocolo
la inercia incesante de tu cabellera
demente negrura que me asienta
en descampados emocionales
donde fluye la existencia
ese meteorito
tan escéptico
La esquiva ternura del olvido
no acomete no defiende y el
desconcertante peso del pasado
magulla a deshoras
cuando tú tiñes tu refugio
de dulzura y sangre
y la melodía rezongante
del pelo en tu nuca
no me protege
Sorber tu vivencia y esa
locura oscura o entonces
desesperada supervivencia
sábado, 10 de noviembre de 2007
EL IMPERTURBABLE
El imperturbable rol del infinito
presiona nuestros débiles cráneos
no turba la inconsciencia
turba el desamparo
de tu esgrima de labios
el dolido cansancio de tu sacrificio
tu niñez menguante, tu agarrotado olvido
son todo luces caídas en que te transformas
la imprenta mal ajustada en que te cifras
un equilibrio distribuido mal
la ruta del mártir que no te exigen
este desertificar la ternura
y almidonarse en palabras ásperas
no nos corresponde
es una prótesis oscura
que nos languidece
presiona nuestros débiles cráneos
no turba la inconsciencia
turba el desamparo
de tu esgrima de labios
el dolido cansancio de tu sacrificio
tu niñez menguante, tu agarrotado olvido
son todo luces caídas en que te transformas
la imprenta mal ajustada en que te cifras
un equilibrio distribuido mal
la ruta del mártir que no te exigen
este desertificar la ternura
y almidonarse en palabras ásperas
no nos corresponde
es una prótesis oscura
que nos languidece
CADA MAÑANA
Cada mañana repliego el horizonte
con el extraño abrigo de tu ausencia
En intimidad deleito
cada instancia observada por ti
cada grito de auxilio de la ceniza
La indisciplina de nuestra agenda
nos aferra tanto al caos
como a la fiebre espontánea
de enamorarse
Pero tú ahora confiésalo
dónde está el epicentro de ese orgasmo
con el extraño abrigo de tu ausencia
En intimidad deleito
cada instancia observada por ti
cada grito de auxilio de la ceniza
La indisciplina de nuestra agenda
nos aferra tanto al caos
como a la fiebre espontánea
de enamorarse
Pero tú ahora confiésalo
dónde está el epicentro de ese orgasmo
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